miércoles, 7 de febrero de 2007

PSICOTERAPIA INFANTIL

LA PSICOTERAPIA INFANTIL Se dedica al diagnóstico y tratamiento de comportamientos, pensamientos y emociones de niños y adolescentes que encuentran dificultades para desenvolverse en su vida diaria. Los terapeutas trabajamos para que estos niños y jóvenes puedan desarrollar sus capacidades y consigan superar sus conflictos a través de diferentes técnicas psicológicas como la hora de juego, el dibujo proyectivo, a través de cuentos, con técnicas de relajación, etc. Prestamos nuestros servicios a familias que sienten que necesitan una ayuda más individualizada y concreta. Asesoramos y proponemos soluciones a los papás que encuentran dificultades para enfrentarse a los problemas que les presentan sus hijos en el día a día. Con mucha ternura y desde el respeto absoluto atendemos cada caso de manera exclusiva y única, elaborando nuevos métodos que favorezcan las posibilidades de crecimiento y habilidades personales que todo niño posee. Confiamos plenamente en las capacidades que tienen los niños y jóvenes para aprender de manera rápida, recuperarse de las dificultades y seguir avanzando en la vida.

Podríamos pensar que los problemas de los niños no son importantes por el mero hecho de que todos hemos podido pasar por algo semejante y seguimos adelante. Pero no todos los niños son capaces de manejar las situaciones de la misma manera, ni tienen las mismas estrategias, lo que les lleva a sufrir en silencio o a mantener ciertos comportamientos que ni los propios padres comprenden.

¿Por qué no hablan los niños cuándo algo les preocupa?

No siempre que existe un problema se tiene la suerte de saber cuál es. En muchas ocasiones se sienten mal y se comportan en consecuencia sin saber qué es lo que les está haciendo actuar así. Quizá los padres no siempre estén preparados para afrontar la problemática de sus hijos o quizá los niños no sienten que los padres les puedan comprender. Lo que es importante, es aprender a escuchar a los hijos y saber valorar que ellos, aunque pequeños, también tienen sus preocupaciones que les hacen sufrir y a veces les cuesta expresar. El no sentirse comprendido es muy duro para cualquiera que lo esté pasando mal.No es raro que un niño en la consulta te comente que su problema no se lo podía contar a sus padres porque ellos no lo iban a entender y además, se iban a sentir mal con él. La evaluación es el primer paso para acercarnos al problema del niño y para seleccionar la estrategia de tratamiento, pero el trabajo que se lleva a cabo debe involucrar a las personas que forman parte activa de la vida del niño. Nos referimos principalmente a la familia que tanto puede llegar a hacer por el bienestar del pequeño. Cuando se trata de problemas infantiles, su foco normalmente está por igual en el niño y en la situación de la familia. La edad de su hijo es importante, lo mismo que el grado de preocupación que tiene el niño por el problema en ese momento. En ocasiones nos toca trabajar solo con él porque sus condiciones de vida no nos permiten otra cosa; también es posible cambiar ciertos patrones de conducta que dificultan la evolución del niño en determinados momentos de su vida.